lunes, 15 de abril de 2013

Reflexiones de un General

Abril 14 de 2013
Desde hacía un buen tiempo no tomaba el teclado de mi PC para escribir ningún mensaje alusivo a la situación que vivimos los colombianos y especialmente los miembros de la Fuerza Pública, quienes vamos a ser los únicos damnificados de la "hecatombe" que se nos avecina si de una buena vez no asumimos las responsabilidades que nos competen.
Me animó abrir este espacio la reflexión hecha por el señor BG Carlos Leongómez Mateus; yo sentí la misma desesperación y angustia que lo motivaron a él a reflexionar y me preguntaba en el silencio si todos, o por lo menos una buena parte de los miembros de la fuerza pública, así lo sintieron y lo vieron. Fue una clara y flagrante violación de la constitución y ley a la que fueron inducidos los uniformados que asistieron. Como estoy seguro que no fue por su propia voluntad sino en el cumplimiento de una orden, entonces a quien o quienes hay que juzgar?.
 
Esta es la reflexión del Señor General Leongómez
 
 
"Apreciados amigos:
 
Muy rara vez me pronuncio sobre los acontecimientos del campo nacional o vecinal. Prefiero leer lo que algunos amigos, centros de pensamientos y periodistas elaboran para alimentar mi espíritu y tomar mi propia decisión respecto a los puntos tratados. Pero hay algunas ocasiones en que no me puedo resistir. Es tanta la indignación que me causan algunos acontecimientos, que me siento obligado a elaborar unas cuantas palabras para que ustedes, así no lo compartan, por lo menos me sirve para desocupar las angustias que me acongojan por la impotencia y desilusión que siento al no poder hacer absolutamente nada para remediarlos, así que excusen estas notas por que los estoy tomando como mi paño de lágrimas.
 
Tranquilos, no los cansaré con lo que está sucediendo en Venezuela y sus elecciones para elegir presidente. Ello no me trasnocha. Cada pueblo se merece la suerte que elige. Tampoco los voy a distraer con lo que está sucediendo en La Habana-Cuba. Bastante se ha escrito, se está escribiendo y falta correr mucha tinta. A propósito, un amigo común me aclaró que hasta ahora se encuentran dialogando y que las negociaciones vienen después. Debo creerle por ser quien es.
 
Entonces vayamos al grano. El tiempo apremia y se lo ocupados que se encuentran para que este servidor, iluso por supuesto, los distraiga con posiblemente tonterías que todo el mundo lo sabe y que con ello no estoy descubriendo el agua tibia.
 
PRIMERO: se ha tornado común que los indígenas del Cauca capturen, retengan, humillen y acusen a nuestros soldados en ese territorio. Desde el oprobioso caso del sargento llorón (Rodrigo García), el cual fue puesto de ejemplo, condecorado y premiado con un viaje al Sinaí, nuestros soldados hoy en día continúan en esa región en las mismas circunstancias  pienso yo, esperando que les den el mismo premio. Y lo más triste nadie dice ni hace nada. Ni siquiera el actual fiscal, que no hace otra cosa que amenazar, criticar pero con cero resultados. Vieron las payasadas de este señor el día de ayer respecto a la filtración de coordenadas y posteriormente insultando al Procurador? Para Ripley.
 
SEGUNDO: Estamos en el cuarto mes del año y no ha habido nadie que se pronuncie respecto del merecido (así sea miserable) aumento de sueldo para el sector Defensa. Esta situación se ha vuelto costumbre, no solamente por parte de este gobierno, sino de los que lo antecedieron. Cuando llegue el incremento salarial, el IPC del presente año ya se lo ha carcomido. No se requiere saber de economía para entender algo tan simple. Pero lo que más rabia da es que el actual gobernante diga a los cuatro vientos lo que su gobierno ha hecho en favor del bienestar de nuestra gente. Por favor, de estos anuncios no comen los uniformados.
 
TERCERO: Lo que más me animó a escribir estas notas fue ver por TV a una cantidad ( y muy grande) de uniformados de todas las Fuerzas en el monumento a los caídos en acción de la calle 26. Para mi. esto fue la gota que rebosó mi paciencia. Con el Presidente a la cabeza rindiendo honores o como quiera llamarse, a la memoria de JORGE ELIECER GAITÁN y por supuesto dando su voz de aliento para que la famosa paz llegue a nuestro País. Cuándo pregunto, hemos rendido nosotros un homenaje al mártir liberal? Y de paz no hablemos por que estamos cansados de esta palabra que nos han metido en la cabeza durante tantos años, como si nosotros fuéramos unos brutos y no entendiéramos de ello.
 
Aceptaría de muy buena gana que hubiesen tomado una buena excusa para reunirse allí,  como por ejemplo los viles asesinatos de los generales Landazábal Reyes, Gil Colorado, por solo citar estos dos casos. Hubiese aceptado por ejemplo que por lo menos se recordara a los cuatro últimos asesinados del ejército por parte de las FARC en el cerro Las Antenas de Corinto (Cauca). Quien se va a acordar de ellos? Si acaso sus familias, por que la verdad sea dicha, en este momento nadie los llora.
 
Y saben que es lo más triste de esta historia? El presidente Santos refiriéndose a las FFMM manifestó en la plaza de Bolívar despidiendo al relevo del Batallón Colombia en su viaje al Sinaí: "Exijo respeto y reconocimiento y que no se haga política a costa de su trabajo por Colombia".
 
Estos militares y policías fueron llevados bajo orden a la calle 26 el día de ayer. Tenían que estar desde las cinco de la mañana para ensayar por supuesto la presentación. Crean amigos, que les dieron la orden hasta a los oficiales profesionales que hacen parte de la reserva. Hasta dónde hemos llegado.
 
Como corolario: es o no participación en política esto que han hecho con nuestras Fuerzas Militares y de Policía? Por favor, no nos digamos mentiras. Es clara participación en política. Aquí es donde deben meter la mano el jactancioso Fiscal y el Procurador. Quién dio la orden? Averígualo Vargas. Hay cosas más urgentes que estas tonterías.
 
Tenía un nudo en el cuello y deseaba desahogarme. Hay que ser solidarios si. Pero también hay que criticar con franqueza cuando se requiere. Esto es lo que nos debe caracterizar, por que así nos lo enseñaron nuestros jefes. El que agacha la cabeza una vez, la seguirá agachando. Peló el cobre.
 
Un abrazo y por favor disculpen
 
BG. Carlos Leongómez Mateus